Talleres Azofra ganará 1.500 metros cuadrados para su próxima ampliación

La empresa, que tendrá lista su nueva nave en septiembre u octubre, admite problemas de falta de mano especializada y abastecimiento, sobre todo de aluminio

La ampliación de la empresa Talleres Azofra, de Nájera, la mercantil más avanzada tecnológicamente de la localidad y que tiene en la exportación su principal cartera de pedidos, está un poco más cerca tras la aprobación inicial de tres de los trámites urbanísticos necesarios.

Así la Junta de Gobierno ha dado el visto bueno al convenio urbanístico de gestión en el ámbito de la unidad de ejecución UE-I 3J Cascajares del Plan General. El mismo sirve para concretar el cumplimiento del deber legal de cesión del 5% de aprovechamiento urbanístico mediante el pago de 7.632 euros. Los otros dos trámites son la aprobación del proyecto de compensación del propietario único de la unidad de ejecución antes referida, del proyecto de urbanización de la misma.

 
 

Cuando finalicen los trámites la mercantil najerina dispondrá de una parcela de 1.500 metros cuadrados para realizar la ampliación de sus dependencias. «Ahora mismo dispone de 3.000 metros cuadrados construidos, que es donde tenemos ubicada nuestra maquinaria, y con la nueva parcela dispondremos de un 50% más», explicaba ayer el dueño de la empresa, Paco Montoya, quien adelantaba que «además tenemos otros 3.000 metros más, de los que podremos construir más adelante en otros 2.000».

Los planes para la nueva nave industrial pasan por «poder instalar nueva maquinaria y de mayor tamaño, ya que tenemos que estar renovándola constantemente. En los últimos tiempos está cambiando mucho la tecnología y para seguir siendo punteros en este sector, debemos ponernos al día periódicamente».

También se plantean incrementar la plantilla de trabajadores, actualmente formada por 28 personas, aunque en este caso, Montoya lamentaba que «tenemos esa idea de contratar más empleados, pero hay problemas en encontrar personal especializado. Estamos cogiendo chavales que terminan los estudios y vienen a hacer las prácticas, ya que tenemos que ir formándoles para que se adapten a nuestro trabajo, pero luego se van».

Sea como fuere, considera que «para septiembre u octubre podremos tener terminada esta nueva nave y poder integrar en la misma la maquinaria», porque la firma continúa su expansión y tiene visos de no parar por el momento, ya que como señala el responsable, «tenemos pedidos firmados con nuestros clientes hasta 2024». En la actualidad están trabajando para empresas de ferrocarril de Alemania y Dinamarca.

No obstante, en los últimos tiempos están teniendo problemas de abastecimiento de material, fundamentalmente aluminio de alta calidad. «Además de que se han duplicado los precios, hay unos plazos de entrega que se dilatan bastante», explicaba Montoya. En ese sentido señalaba que ayer mismo estaba previsto que atracase en el puerto de Barcelona «un barco con 120 toneladas de aluminio para nosotros, que tenía que haber llegado hace diez días allí».

 

Aranceles a los chinos

 

A su juicio todos estos problemas de incremento de precios y retraso en el suministro es debido «a los aranceles que se les han impuesto a los chinos para poder exportar mercancía, que está influyendo negativamente porque las empresas europeas de aluminio no dan abasto y nosotros necesitamos unos formatos especiales y muy gordos, y nos dicen que no los fabrican», por si fuera poco, «el precio se ha duplicado, hemos pasado de cuatro a ocho euros el kilogramo».